Si yo fuese un pez con alas de azucar nadando en una pecera de agua,

Si yo fuese una mosca pegada a una bombilla apagada... fundida tras una sobredosis de electricidad...

Si yo fuese ese hombre que un día te encontró en la barra de un bar de la Rue Gaulle, con el pelo cayéndote sobre los ojos y la sonrisa diluida en el café

el hombre que consiguió dormir contigo aquella noche gracias a un poema de Brecth y un abrigo con solapa. El hombre que te llevó a la cama para follarte, para devorarte, para sumergirte en el loco canibalismo del amor... donde todo permanece el tiempo suficiente para hacerte creer que puede ser eterno...

Aquel hombre que, durante los diez años siguientes, te pegó por cada uno de los versos que recitó aquella noche para convencerte de que los golpes se merecen y los besos se consiguen, que el amor es dolor y no poesía .pero el amor no es dolor pequeña...el amor no es dolor....y ahora que ya no estás aquí, echo de menos acudir al café de Gaulle para ver tu sonrisa reflejada en el café e imaginarme besándote en los labios .Pero nunca leí nunca la obra de Brecth. Ni me compré un abrigo con solapa . simplemente te observaba desde lejos. tan lejos....que te perdí para siempre.